116 líderes y delegados de la Orden de Hermanos Menores se han reunido hoy en el Collegio Internationale San Lorenzo da Brindisi, para celebrar la diversidad de nuestra fraternidad y la profundidad de la vida evangélica, inspirados por el versículo de la Escritura: «Levántate… y Cristo te iluminará» (Ep. 5:14). Somos la única Orden Religiosa que ha podido celebrar un Capítulo General durante este tiempo de pandemia; y es la primera vez en la historia que la OFM celebra un Capítulo General en una casa de nuestros hermanos capuchinos OFM.
En la Misa de Apertura, el Ministro General, Hermano Michael Perry, habló del significado más profundo de un Capítulo, «Hemos venido a este evento sagrado del Capítulo General para entrar en el mismo tipo de experiencia de la que habla San Pablo en su carta a las comunidades cristianas mixtas judeo-gentiles en Éfeso, una experiencia de curación, de reconciliación, de ir más allá de nosotros mismos, de empezar de nuevo como miembros del único Cuerpo de Cristo». Tras la Misa de Apertura, se celebró una Ceremonia de Apertura junto a la Plaza Mayor de San Lorenzo, con vistas a las dos cruces centrales que simbolizan la Cruz de Cristo y la Cruz de Francisco.
Tras el pase de lista y el juramento de los oficiales, se reunieron las 12 Conferencias de la Orden, seguidas de la elección de los moderadores y la designación de los escrutadores. Los Moderadores del Capítulo General 2021 son el Hermano Cesare Vaiani (lengua italiana), el Hermano Manuel Corullón (lengua española) y el Hermano Aidan McGrath (lengua inglesa).
Finalmente, el Hermano Carlos Salto, Presidente de nuestra Comisión DAFO, hizo una presentación del análisis de los informes de las Conferencias sobre las Fortalezas, Debilidades, Oportunidades y Amenazas que experimenta hoy la Orden en nuestras presencias, ministerios y misiones en el mundo. Una constatación común de la mayoría de las Conferencias es que los hermanos necesitamos crecer en la búsqueda activa de la voluntad del Señor con fidelidad e integridad, en la apertura y solidaridad de unos con otros como hermanos menores, y en la atención para escuchar verdaderamente al mundo que nos rodea.
En definitiva, tal y como resume el hermano Michael, «la realidad de la Orden no es muy diferente de la situación de las comunidades cristianas de Éfeso. También experimentamos muchos desafíos, consecuencia de la gran diversidad presente en la vida de la Orden: ideológica, espiritual, socioeconómica, clerical/laica, heterosexual/gay, cultural, geográfica, racial, de casta, de región, etc. La llamada a la conversión que Pablo anuncia a los creyentes… que sólo cuando reconozcamos y aceptemos nuestra debilidad, nuestra incompletud, cuando despertemos a la necesidad de abrir nuestras vidas a la diversidad de experiencias presentes dentro de la comunidad creyente, presentes dentro de nuestras fraternidades locales en la Orden, y dejemos que esta diversidad enriquezca nuestra vida humana y espiritual, sólo entonces llegaremos a la experiencia de ser «edificados juntos en una morada de Dios en el Espíritu» (Ep. 2:22). El Espíritu estará presente, impulsándonos y ayudándonos siempre a «seguir la enseñanza y la huella de nuestro Señor Jesucristo…» (RnB 1) juntos como hermanos en el camino de la vida».
Con gozo y esperanza los hermanos de nuestra fraternidad, en la provincia de la Inmaculada Concepción en España, nos unimos a los trabajos de los hermanos Capitulares. Como Moisés en el monte, nuestras manos están alzadas para acompañaros y sosteneros con la oración en vuestros trabajos al servicio de la Orden, de la Iglesia y del mundo.
Gracias por el primer informe y crónica